¿A qué juegan los dioses del Olimpo? Gea, la madre Tierra, está despertando a un ejército de monstruos para acabar con la humanidad... y ellos se entretienen mareando a los semidioses, los únicos que pueden frustrar sus perversos planes. Ahora han mandado a Percy al campamento Júpiter casi sin recuerdos y con la inquietante sensación de que él, el griego, es el enemigo. Por suerte, contará con el apoyo de Hazel, una chica nacida hace más de 80 años, y de Frank, un muchacho que todavía no sabe muy bien cuáles son sus poderes (ni si los tiene). Juntos deberán emprender una peligrosa expedición para liberar a Tánatos, el dios de la muerte, de las garras de un gigante...

Reseña:

Leer a Rick Riordan es saber que siempre te vas a encontrar con un libro divertido, lleno de acción y que no podrás dejar de leer hasta terminar, y El hijo de Neptuno no fue la excepción.

La novela empieza ocho meses después de El héroe perdido, Percy Jackson (ya sabemos que pasó con él) ha estado durante semanas huyendo de las Gorgonas hermanas de Medusa, no importa las veces que él las mete ellas simplemente no se van al Tártaro, Juno le han borrado la memoria, solo recuerda unas cuantas cosas y a Annabeth, y se dirige al sur donde lo han mandado los lobos. Una buena jugada de la madre de los dioses.

En el sur Percy descubre el campamento Jupiter, donde se mantienen las costumbres de la antigua Roma, los dioses se les conoce con sus nombre romanos, hasta adquieren diferente personalidad, son dirigidos por los Preatores y están divididos por legiones, ah y odian a los griegos. Ahí encuentra a los otros dos protagonistas Hazel Levesque hija de Pluton (con un pasado bastante interesante) y Frank Zhang un chico inseguro pero valiente y un poder que va más allá de lo que él imagina. Marte los envía a una misión, donde tiene que ir a Alaska a rescatar a Tánatos que ha sido capturado por un gigante aliado de Gea, con su liberación los monstruos y los que tengas que estar en el Tártaro podrán hacerlo.

Este libro me gustó mucho más que el anterior, al nuevo par que nos presento Rick (para mi gusto)  podría jurar por la Laguna Estrigia que son los mejores personajes que el escritor ha construido, son geniales, ellos y Percy hace buen equipo. Y el libro esta narrado desde la perceptiva de cada uno.

Al igual que los libros anteriores está lleno de dioses, giros inesperados, mucha acción, algunas cosas predecibles y un humor genial. Y el final me dejo con ganas de más.YA quiero la marca de Atenea en mis manos y definitivamente me quedo con el campamento romano.

Puntuación: